Talleres
La vocación pedagógica de Paz Vial se despertó de forma natural, por su cercanía profesional y personal a Paulo Freire. Fue con Mima Freire, hija mayor de Paulo, con quien abrió un primer taller, destinado a los hijos de los brasileños exiliados en Chile.
Poco después participó en los talleres creados por la Universidad Católica en barrio marginales de Santiago, donde descubrió también el poder liberador e integrador de las enseñanzas artísticas.
Desde entonces compaginó su pintura con las clases a niños y adultos. Recién llegada a Oviedo se incorporó al profesorado de la École Maternelle Française. En El Escorial abrió su propio estudio, por el que pasaron cada año, entre 1981 y 1988, decenas de niños y adultos de la localidad.
Ya en Bruselas, dirigió talleres en la Maison de l’Amérique latine y en la Escuela Europea de Uccle, hasta su regreso al Escorial en 2008.
Su pedagogía puede resumirse con el título de uno de los grandes libros de Paulo Freire: la enseñanza como práctica de la libertad.